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jueves, 18 de noviembre de 2010

Nota mental II.

Y cuando pienses, sí, admito que soy torpe, pero ya estoy saliendo de ese círculo vicioso, entrarás en la cocina y minutos después te despertarás tendida en el suelo junto a la puerta del lavavajillas, con platos y cubiertos a tu alrededor y algún que otro moratón. Pasada la perplejidad, suspirarás aliviada al comprobar que tu orgullo se mantendrá intacto. No hay testigos.

PS. La ilusión se hará añicos cuando te des cuenta de que la chica de la limpieza lleva un rato gritándote si estás bien. (Que vaya con la pregunta retórica, se las trae.)

miércoles, 31 de marzo de 2010

¡Descubrimiento fascinante!

Hoy he descubierto que, en efecto, es posible tropezarse por las escaleras.
Sí, es posible tropezarse subiendo las escaleras, y caerse hacia arriba. No sé qué leyes de la física acabo de burlar, pero ya nada me parece irrealizable.